La sexta sesión comienza con el habitual calentamiento que se diluye en una transición hacia la coreografía incorporando en el primero algunos elementos de la segunda. La sala se plantea como un mapa, una representación del territorio. Las participantes se dispersan por “el barrio”, la idea es acabar haciendo una rotllana. Los diferentes de la coreografía se van sucediendo con varios temas musicales “Volar, lo que se dice volar…”, ritmo ternario. Una parte de la coreografía contiene elementos “figurativos” que reproducen diferentes juegos infantiles. Una de las señoras pregunta si al salir fuera del centro saldrá todo bien “En la calle pasaré un poco de miedo escénico”, Patricia y Moisés se encargan de transmitir confianza,“Somos las más mejores del mundo mundial” apostilla otra de las vecinas. La semana que viene se saldrá a trabajar la coreografía en la Torre del Baró y se registrará en vídeo. Llega el momento de cerrar la sesión con los estiramientos, la valoración y la canción. Hoy propone Natalia, trae un tema de Pablo Alborán, uno de los favoritos de su hija Beatriz. La canción gira en torno a una relación romántica, pero asociado a la historia de Natalia adquiere otro sentido “Como quema que te vayas, entre lágrimas me duele”. Natalia se emociona “Lloro, pero de alegría”.
Tal como acordamos la semana anterior, la séptima sesión transcurre al aire libre, en el mirador cercano a Torre Baró. No sin incertidumbre, por un momento se duda de la subida por el frío, el tiempo ya empieza a insinuar la Semana Santa. La salida tiene una finalidad, grabar la coreografía para poder montar un vídeo. Una vez en el espacio, tratamos de hacernos con él, de adaptar la dinámica de la clase a los condicionantes que ofrece. Las reminiscencias de los juegos infantiles que se han ido fijando en la coreografía adquieren nuevos matices en el espacio público. Las columnas, las escaleras, el mirador… todo juega su papel en la grabación.
La octava sesión es la última que será dirigida por Lo Relacional, a partir de la próxima semana la responsabilidad la recogen las alumnas. Alba, Laura y Clara no parecen amedrentadas por el reto ¡Todo lo contrario! Su presencia en la dinámica ya será mayor durante esta jornada, tras el calentamiento Alba explica un juego: la música sonará y cuando pare habrá que escribir en el papel (que cada una portará en la espalda) de la persona más cercana algún adjetivo con el que la identifiquemos. A partir de mayo, la presencia de Interfícies en Roquetes se redobla, las alumnas de Psicología comunitaria toman las riendas del grup de dones, mientras Lo Relacional inicia un nuevo proceso en el IES Turó de Roquetes donde el juego será de nuevo hilo conductor de la relación entre salud y espacio público, esta vez con jóvenes de primero de E.S.O.
